Nunca fui mucho de comer lentejas. Aunque mi madre asegura que de pequeña me encantaban y las pedía siempre, ya cuando tenía 8 ó 10 años no me agradaban mucho cuando regresaba del colegio y me esperaba el plato encima de la mesa. Hoy en día no es que me encanten pero las incluyo en mi alimentación aunque es verdad que nunca he ido más allá del clásico guiso con zanahoria y chorizo. Cuando me faltaba un poco de hierro las consumía más a menudo, ya que tienen gran aporte de este mineral además de fibra. Cuando me contactaron desde Lentejas de Tierras de Campos para hacer una receta dulce, no podía creérmelo. La idea cuesta encajarla aunque ellos me aseguraron que buscaban algo diferente, alejado de las habituales recetas de ensaladas y guisos. Así que me puse a pensar cómo incluirla en una crema o en una masa. Después de varias pruebas, me he decantado por incluirlas en el amasado de una receta clásica italiana: los Cannoli sicilianos. Me baso en la receta de Il cucchi...
Regresamos con fuerza y os propongo una receta que llevaba tiempo rondándome el pensamiento. Había visto algunas imágenes sobre este tipo de elaboraciones trenzadas y tenía mucha ilusión en poder elaborarlo. Ya comenté que Italia ocupa un lugar en mi corazón y quería recordar tiempos pasados elaborando repostería clásica italiana. Hablar del amor por las masas es hablar de las Hermanas Simili . Eran dos "sorelle" de la ciudad de canales escondidos, Bolonia, y cuna de una de las universidades más antiguas de Europa. Valeria y Marguerita aprendieron el oficio del pan desde pequeñas, en el obrador de la familia. Con los años abrieron su propia panadería. Su emoción por el oficio y el interés de los clientes, dieron lugar a una escuela de panadería que llegó hasta el New York Times a través de una alumna extranjera. Dándole fama mundial y publicando sus recetas en el libro "Pane e Roba Dolce" en 1996. Eran sabias defensoras de que el pan se podía h...