Hola muy buenos días a todos! Seguimos encauzando septiembre y regresamos con una receta con historia. Sabéis que me encanta explicar el origen de muchos postres o su evolución con los años. No es un secreto que la repostería francesa es una de mis favoritas y que soy de ésas personas que se maravillan delante de los escaparates de las patisseries de París o de cualquier otra ciudad gala. Y ya del pan mejor no hablar porque entonces me desviaría mucho del tema, dejémoslo en que son un verdadero sueño para el paladar.
Hoy nos trasladamos de nuevo a Francia y brindamos una receta de Julia Child. Esta reconocida chef americana que vivió unos años en París y estudió en Le Cordon Bleu, despertó su amor por la cocina francesa por casualidad. Gracias al buen paladar de su marido, fue él quien la introdujo en el buen comer de la gastronomía francesa durante su estancia en este país, platos que en palabras de ella, producían "la apertura de alma y espíritu".
Este amor y degustación por la comida, la llevaron a dar clases de cocina para después enseñar a otras mujeres americanas. Mientras aprendía francés fue traduciendo las recetas a su idioma y, en colaboración con otras socias, elaboraron un libro de recetas de cocina francesa pensado para las mujeres americanas.
Un compendio denominado El Arte de la Cocina Francesa. Primer libro de recetas francesas para mujeres americanas. La idea era explicar detalles, utensilios y el paso a paso de muchas recetas que consiguieron publicar después de varios intentos fallidos, especialmente por el volumen de páginas que hacía desconfiar a algunas editoriales de su éxito. Como curiosidad, este libro no sería traducido al español hasta 50 años después. Después de otro volumen más de esta obra y más publicaciones, Child ya de vuelta en américa, se convirtió en un fenómeno mediático a través de sus libros y artículos sobre cocina y, sobre todo, por ser partícipe del programa de cocina, The French Chef, el chef francés, que estuvo 10 años en antena.
Como dato curioso, su cocina la podéis encontrar en el Museo Nacional de Historia de Estados Unidos, en la ciudad de Washington. Cocina que aparece en la película Julie & Julia, film que ha revivido y popularizado este mito en nuestros días a través de los avatares de una blogguer que se desafía así misma a elaborar las 524 recetas del libro en un año. Es muy divertida y ayuda a conocer la pasión de estas dos mujeres por el arte culinario.
A través del reto de Food Fiction and Division, que mezcla cine y gastronomía, me decanté por una de las tartas que aparece en la película Julie & Julia. El pastel Reina de Saba. Un delicioso bizcocho a base de chocolate, mantequilla y almendras, cubierto con una deliciosa capa de chocolate y decorado con más almendras. Todo un manjar digno de auténticas reinas. Pasemos a la receta!
Espero que hayáis disfrutado de esta receta tanto como nosotros. Ha sido muy especial elaborarla pensando en una personalidad como Julia Child que la elaboró en su momento y que tanto esfuerzo hizo por llevar a cabo su sueño.
Creo que como blogger de cocina, todas nos sentimos un poco como Julie Powell en Julie & Julia cuando se establece unas metas para su blog, conecta con la receta que está elaborando o cuando parece que se desmorona todo nuestro proyecto. Brindo por mantener siempre esa ilusión y que no perdamos nunca el amor por la cocina.
Cerramos este post con una frase del último libro de Julia Child, Mi vida en Francia, que resume todo en pocas palabras y es que "los placeres de la vida y la mesa, son infinitos. Toujours Bon appétit!"
Un saludo muy dulce. Vuelvo pronto con más propuestas!
Maribel García 🍓🍓🍓
La tarta Reina de Saba es una auténtica delicia!!!! Me encantan los frutos secos en los postres, le dan un toque increíble. Es genial que nos cuentes el origen de algunos postres, aprendo muchísimo en tu blog.
ResponderEliminarMe encanta que te guste esta receta. Los frutos secos siempre son un plus... y en las tartas el toque es increíble.
EliminarMe llena de satisfacción que aprecies cuando cuento el origen de los postres. Le damos un contexto y de paso apreciamos un poco más su historia. Un abrazo y muchas gracias por comentar!!! 🤗
Menuda delicia esta tarta Reina de Saba!!! El chocolate y las almendras es una combinación que me apasiona, los frutos secos siempre le dan un toque especial a los postres.
ResponderEliminarAsí es María. Las almendras y el chocolate conjugan de maravilla y si es en una tarta, es una delicia para nuestro paladar. Muchas gracias y un saludo!!!
EliminarAy, pero qué maravilla! No conocía la tarta Reina de Saba pero ya está en mi lista! Gracias! ❤️
ResponderEliminarMe alegra descubrirte tartas como ésta. Tiene un origen hermoso y además está exquisita! Un saludo!
EliminarSe me ha hecho agua a boca nada más leer que lleva almendras y amaretto! La tarta reina de saba parece perfecta para las fiestas. Muchas gracias por compartir!
ResponderEliminarAsí es Yasmari. Es perfecta para cualquier ocasión y le da un toque chic a las fiestas. Un placer que te guste ☺️ Un abrazo!
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