El calor nos ha llegado de repente y casi no nos hemos enterado de la primavera. Después de un mes de marzo de mucha lluvia, estamos en un abril algo atípico con respecto a las temperaturas. Espero que cambie un poco el tiempo y podamos disfrutar de una merecidísima primavera. Llevo un tiempo pachucha por varias cuestiones que me han tenido algo baja de moral. Estoy remontando como puedo pero no quiero dejar de lado este mundo dulce que tantas alegrías me da. A veces la vida te da golpes que no esperas y sientes que pierdes las fuerzas. Mi blog ha sido siempre una vía de escape, mi paraíso personal o ventana al mundo como me gusta llamarlo. Encender el horno siempre lleva una parte de magia porque no sabemos el resultado de nuestra receta hasta pasado un tiempo. Es precisamente esa magia la que me da fuerzas y la que me ayuda a experimentar, a buscar nuevas historias tradicionales nuestras o de otras culturas que me fascinan. Regresamos con una mezcla que hacía tiempo me rondaba la
Regreso en esta semana tan especial en la que muchos niños se disfrazarán y participarán en fiestas con la consigna de "Truco o trato". A pesar de ser una tradición norteamericana con origen europeo, siempre me han encantado las historias de brujas y el misterio que rodea el día de todos los santos. Esa compuerta que se abre entre un mundo y el otro para convivir en paz durante una noche según unas tradiciones, para asustar a las personas según otras y un largo etcétera que la hacen una de las noches más terroríficas e interesantes del año. Me gusta organizar fiestas y disfrazarme en estas fechas ^^ Quería hacer una entrada para estos días y de paso me he apuntado al concurso Pastelería de Miedo de Pastelería Creativa .Os animo a que participéis ya que sólo por hacerlo envían unas fichas de recetitas de pasteles de Planeta de Agostini. No he tenido tiempo en estos días y no he podido hacer una tarta como tenía pensado pero bueno, dejo mi aportación para quien se anim