El calor nos ha llegado de repente y casi no nos hemos enterado de la primavera. Después de un mes de marzo de mucha lluvia, estamos en un abril algo atípico con respecto a las temperaturas. Espero que cambie un poco el tiempo y podamos disfrutar de una merecidísima primavera. Llevo un tiempo pachucha por varias cuestiones que me han tenido algo baja de moral. Estoy remontando como puedo pero no quiero dejar de lado este mundo dulce que tantas alegrías me da. A veces la vida te da golpes que no esperas y sientes que pierdes las fuerzas. Mi blog ha sido siempre una vía de escape, mi paraíso personal o ventana al mundo como me gusta llamarlo. Encender el horno siempre lleva una parte de magia porque no sabemos el resultado de nuestra receta hasta pasado un tiempo. Es precisamente esa magia la que me da fuerzas y la que me ayuda a experimentar, a buscar nuevas historias tradicionales nuestras o de otras culturas que me fascinan. Regresamos con una mezcla que hacía tiempo me rondaba la
Ya llegó la primavera y la verdad es que aún no se hace notar con tanta lluvia. Pero aún así, traemos un poco de color en estos días grises con estos bollitos Tropézienne . De origen francés, es la versión de la famosa tarta Tropézienne . Una elaboración del pastelero de origen polaco Alexandre Micka, quien llegó a la costa azul francesa a mediados de los '40. A inicios de los '50 abrió una pastelería con recetas como ésta, basada en una de su abuela, que combinaba la masa de brioche con crema madame y espolvoreada con azúcar. Aunque en un principio tuvo éxito con los clientes de esa localidad costera, el impulso y posterior éxito se lo daría el equipo de rodaje "Et dieu creá la femme" ( Y Dios creó a la mujer) , de Roger Vadim. En esta película participaba la actriz Brigitte Bardot , quien quedó enamorada de esta elaboración y fue ella quien lo denominó como tarta de Saint-Tropez o Tropézienne . La popularidad de este pastel fue tal que en 1973, el pastelero Alex